martes, 19 de enero de 2016

La lucha por la identidad.





        Es necesario reconocer y respetar el cambio de identidad de género a menores de edad, facilitar el cambio de nombres en las actas de nacimiento de personas transexuales, es un compromiso de toda la sociedad en general con la comunidad Lésbico, Gay, Bisexual, Transgénero, Travesti,  Transexual,  tanto en materias legislativas como en defensa de sus derechos. Sin embargo,  es prioridad incluir a los niños,  así como a los adolescentes para que sea una reforma integral.

         Es fundamental realizar reformas, ya que aunque son menores de edad, tienen libre albedrío para decidir la identidad genérica con la que se identifican, y es un derecho que no podemos coartar.

        Por eso desde aquí mi felicitación al Archipiélago Canario,  por ser la segunda Comunidad Española, donde los menores reciben su tarjeta sanitaria con su verdadero nombre, reconociéndose así un derecho, de ahí la importancia de esta iniciativa.

       En éste sentido tanto la Organización de las Naciones Unidas, como la Convención de los Derechos del Niño, mencionan los derechos que poseen los niños, y coloca a la infancia en el centro de las agendas en materia de desarrollo de políticas públicas encaminadas a velar por el interés superior de los mismos.

        Como político,  me corresponde manifestarme por una realidad y acontecer actual de nuestra sociedad y contribuir a disminuir la discriminación que sufren, principalmente nuestros niños y niñas, al incluirlos en el reconocimiento de Identidad Genérica.

Pedro Rodríguez Reyes.

domingo, 17 de enero de 2016

El BBVA apoya la Labor Social de la Asociación de niños con Cáncer, Pequeño Valiente, Asociación Alzhéimer Canarias y la Ciudad San Juan de Dios.




          Las organizaciones sociales realizan una labor fundamental para la sociedad o para ciertos colectivos más necesitados de ayuda. En éste contexto,  y ante el recorte de las ayudas públicas,  adquieren aún mayor importancia las iniciativas privadas, ya lo publiqué anteriormente con la Caixa, hoy le toca al BBVA.
         Gracias a la entidad bancaria,  la Asociación de niños con cancer, Pequeño Valiente, mejorará la calidad de vida y los profesionales y voluntarios atenderan a aquellos niños enfermos y recién diagnósticados de cancer, " cuando a un enfermo se le comunica que tiene una patología o un tumor oncológico, se queda cortocircuitado, en estado casi de shock, con este motivo se les orienta a los enfermos y a sus familias de un primer recurso asistencial o sobre aspectos médicos, laborales, sociales,  etc.
        Asimismo  beneficiarios de la Asociación  Alzhéimer Canarias,  y otros problemas neuronales se beneficiaran del servicio sociosanitario y de apoyo a la familia. Con ellos se trata de conseguir el mayor grado de manteninmiento de las capacidades residuales e integración y normalización social, retrasando su internamiento en centros, así como apoyar a los cuidadores facilitándoles durante algunas horas el descanso.
        Y por último otra entidad sin ánimo de lucro, la Orden Hospitalaria de los Hermanos de San Juan de Dios, una de las mayores organizaciones internacionales de cooperación,  en Gran Canaria tenemos un centro plural, dando respuestas a las necesidades de la persona bajo el concepto de hospitalidad y humanización de la asistencia a quienes lo precisan.
        Desde aquí mis felicitaciones a "Territorios Solidarios", del BBVA,  pues de ellos  requiere la implicación de los empleados, que con la voluntad de ofrecer proyectos creativos que integran y auna personas y con la sensibilidad desde una visión global, amplia y abierta,  apadrinan las propuestas y deciden cuáles reciben financiación a través de sus votos.  Esta iniciativa acoge a cuántos proyectos solidarios que pueda tener las entidades sin ánimo de lucro.

Pedro Rodríguez Reyes.

viernes, 15 de enero de 2016

Unión deportiva.


       

        Respuestas optimistas frente a la enfermedad, es la primera tarea de todo el personal sanitario,  y también una forma alegre de derribar el muro físico y emocional que, inevitablemente,  ejerce el uniforme entre los pacientes y el personal sanitario,  pero, a pesar del gorro, la mascarilla, botas. ... el personal sanitario logramos establecer un vínculo personal con los pacientes. Lo que más cuesta es empatizar con los enfermos teniendo en cuenta las limitaciones del equipamiento. En cambio , y a pesar del traje,  lograr su complicidad es lo más satisfactorio,  sobre todo cuando las cosas empiezan a ir bien. Siempre hay juegos y sonrisas y precisamente ayer, no hicieron falta guantes para acariciar a éstos niños.

       Los integrantes de la Unión Deportiva Las Palmas, se integraron en el hospital Materno Infantil para formar un verdadero equipo, jugadores como el Zhar, Tana, David García,  Nili, Raúl,  Simón,  Araujo y Valerón, visitaron a aquellos niños que más lo necesitan y elaboraron una receta mágica de sueños, proyectos y dificultades a las que se enfrentan las familias de éstos niños con alguna enfermedad.

       A eso se le llama ganas de hacer feliz a todos los niños dentro de una  historia y la de la lucha contra la incertidumbre. La visita de los jugadores de la U.D. ayudó a hacerles ligeramente  más llevaderos los tratamientos y cócteles de medicamentos.

      Para los niños del Materno InfantiI de Gran Canaria, fue toda una sorpresa, de felicidad, de ternura, de cariño. Un sentimiento indescriptible de plenitud y a la vez amargo debido a los problemas y dificultades que les han tocado vivir. Pero aún así y pesar de todo, ayer éstos deportistas fueron los ángeles para estos niños y sus familias.

       En mi mente se almacena muchos buenos recuerdos, la mayoría de ellos historias únicas, como la de éstos valientes jugadores,  que llegaron a  conectar  con la sociedad canaria  de un modo mucho más profundo e intenso que las palabras.

      Para el futuro, para éste 2016, sólo un deseo: que nuestra U. D.  Las Palmas consiga mantenerse en primera, es mi sueño, pues ayer ellos hicieron  que muchos niños pudieran cumplir sus sueños y sentirse como lo que son, especiales.

Pedro Rodríguez Reyes.