sábado, 3 de junio de 2017

El navío de Gloria. Capaz de navegar bajo la superficie del mar.

        Hoy he quedado con la madre de Gloria, y con ella, que es la gran protagonista de este cuento. Gloria es una niña muy despierta, que  a veces presenta impulsividad e hiperactividad tanto motora como verbal, también suele tener dificultades para concentrar la atención durante un proceso determinado. Todo esto lo he ido comprobado a lo largo del paseo que hemos mantenido en el barrio marinero y costero  de San Cristobal.

      Su madre me dice que a estos sintomas se le denomina "TDAH",Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad".
       A Gloria le encantan los animales, pero lo que la deja fascinada son los peces de colores. Antes del recorrido fuimos a una tienda de animales, saqué unas monedas y el señor de la misma calculó cuántos pececillos podía darle, los metió en un cuenco de cristal y con muchísimo cuidado Gloria los llevó hasta el mar, y los soltó en el agua. Al principio los peces, desorientados, nadaban agitados de un lado a otro, pero enseguida se daban cuenta de que volvían a estar en libertad.

      Gloria sentó sus rodillas en la orilla del mar y cogió todo el aire que podía en sus pulmones. Sus mejillas parecían un globo. Después apuntaba su boca hacia el agua y despacito soltaba su aire para ver a esos peces nadar o esconderse  entre las rocas.

     Algunos peces se habían hecho sus amigos y se acercaban a saludarla dándole besitos, pues ella metió la cara dentro del agua. Qué haces?, le pregunté, " pensé que te estabas ahogando". Gloria me contestó,  "qué va" , estaba contemplando el mundo submarino, en algún momento una sirena vendrá a saludarme, "no digas tonterias  Gloria", sentenció su madre. Anda, vamos a seguir paseando.
Nos sentamos en una cafetería a tomar algo, la madre de Gloria me sigue contando las dificultades que encuentran tanto las familias y los profesionales para poder normalizar los procesos en el desarrollo social y familiar y escolar del niño/a con este trastorno.

     Convivir con el TDAH, puede resultar complicado, desde que se le detectó a Gloria, se generó un mayor estrés en el ambiente familiar. Debido a ésto, la madre de Gloria se siente insatisfecha, aunque está involucrada en la educación de su hija. "Me bastó comprobar la afectividad entre ambas.", le resta tiempo para poder hacer actividades al margen del cuidado de Gloria, resultando complicado que otras familias quieran hacerse cargo de ella. Toda esta presión repercutió en la convivencia del matrimonio, llegando al divorcio.

     Mientras tanto la protagonista de la historia de hoy se escondió dentro de un barril. Según estaba dentro se le ocurrió una idea, y no pudiendo esperar comenzó a gritar: "ya lo tengo", "ya lo tengo".  Qué tienes?, pregunté. "Cómo hacer posible lo imposible sin necesidad de magia". Yo la miraba sin comprender nada, su madre reía.
Cuando Gloria se serenó, le pidió papel y lápiz al camarero para explicarnos la idea. Ella dibujó un tonel, con una ventanita a cada lado con sus cristales, y también puso una caña larga para según ella entrara el aire, entusiasmada guardó su invento para cuando estuviera con su padre, éste le ayudará a mejorar su invento, reunir material y finalmente llevarlo a cabo.

    Durante todo el paseo Gloria no dejó de saludar a muchos de sus amigos, como si se tratase de esa visión de las profundidades del mar,  desde esas ventanitas de su submarino,  que nos dibujó, tratando de hacernos comprender, cuántas cosas bellas se esconden a nuestros ojos.
Con una sonrisa de agradecimiento me despedí de Gloria y le dije: Gracias por enseñarme que a veces lo que parece imposible puede no serlo.

Pedro Rodríguez Reyes.



No hay comentarios:

Publicar un comentario