miércoles, 25 de noviembre de 2015

Escultura de Doramas


       
           Doramas, el héroe canario, “el capitán dellos, que era habido por el más esforzado e por principal de toda aquella isla", muerto por Pedro de Vera en la batalla de Arucas, el 20 de agosto de 1480, estaba avecindado ya desde 1478 en las famosas Montaña, Bosque y Cuevas de su residencia moyense en el reino de Gáldar.
            Así lo atestiguan los cronistas y, un siglo después, el fundador de la literatura canaria, Bartolomé Cairasco de Figueroa: “Este es el bosque umbrífero / que de Doramas tiene el nombre célebre…”.
            Y, mediado el siglo XIX, el corresponsal grancanario del “Diccionario geográfico, estadístico e histórico de España” del desamortizador Pascual Madoz –probablemente el Conde de la Vega Grande- señalaba que “…aún se conserva la cueva rústica que habitó el guerrero canario, y los aldeanos la enseñan con orgullo…la hibalvera, con sus floridas hojas, y el bicácaro de los guanches, decoran en forma de guirnalda la entrada de la gruta, la cual hoy día se encuentra solitaria, lo mismo que el bosque que sólo conserva su renombre; son tales sin embargo sus recuerdos que constituye siempre un paraje de predilección para los isleños.

            

          Doramas da nombre al Parque Rural C-12, que comprende 3586,0 hectáreas en los términos municipales de Moya, Valleseco, Firgas, Santa María de Guía, Arucas y Teror, incluyendo entre sus límites dos reservas naturales especiales -Los Tilos de Moya y Azuaje- y una reserva natural integral -Barranco Oscuro-. También da nombre a un barrio de Moya y a la industria emblemática de este municipio.
            En toda Canarias existen calles y otros lugares públicos dedicados a Doramas, destacando por su importancia el Parque Doramas, en Las Palmas de Gran Canaria, donde se instaló una estatua del héroe aborigen, creada por el escultor Abraham Cárdenes en 1941, que hoy está desaparecida.
            En el municipio de Arucas, lugar donde murió nuestro héroe, se encuentra una escultura-fuente denominada Volcán de Doramas, obra del escultor José Luis Marrero.
            Sin embargo, en nuestro municipio no hay ninguna estatua ni hito conmemorativo que recuerde a vecinos y visitantes que este fue el lugar de residencia del héroe canario. Y ello pese a que, en 2007, el Ayuntamiento de Moya encargó una escultura conmemorativa de Doramas para ser instalada en el casco histórico de la Villa y consensuó su ubicación en la plaza de Simón Milián, donde se levantó la base que serviría de apoyo a la pieza escultórica.
 
            La escultura se encargó al prestigioso escultor Luis Alemán Montull, alumno de Abraham Cárdenes en la Escuela Luján Pérez y con obra pública repartida por distintos municipios de las Islas. Agüimes, San Bartolomé de Tirajana, San Mateo, Telde, Garachico, en Tenerife, y Puerto del Rosario, en Fuerteventura, acogen algunas de sus esculturas; aunque quizás su escultura pública más representativa sea el “Monumento a las Actividades Primitivas Canarias” instalado en la Plaza de España con motivo de la conmemoración del 500 aniversario de la fundación de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, compuesto por varias figuras y realizado en piedra de Tamadaba, con una altura aproximada de 14 metros.
            La escultura nunca llegó a instalarse en la plaza elegida, sobre la base que se levantó al efecto. Permanece lamentablemente arrumbada en un solar donde están depositados restos de materiales de construcción y crecen las malas hierbas, sin ninguna protección y expuesta a actos vandálicos que ya la han afectado, fruto de la desidia municipal.
            Ya es hora de encargar su restauración a Luis Alemán Montull y que esta obra suya,  patrimonio escultórico conmemorativo del héroe aborigen más representativo del pasado histórico de la Villa de Moya, sea instalada definitivamente en el lugar elegido para ser contemplada por vecinos y visitantes

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